Un cuento de Navidad
Hace años que me gusta enviar felicitaciones de Navidad por estas fechas, reconozco que la Navidad no es lo mío, no es una época que me haga especialmente feliz, quizá sea el frío (yo soy más de calor), o la luz (eso de que sea de noche a las 17:30 me descoloca), pero lo cierto es que no soy una persona especialmente navideña. Si que reconozco que es una época con un gran poder de conexión, nos conectamos más familiarmente, más allá de los regalos y las comidas navideñas, vemos y hablamos con personas con las que hace tiempo que no teníamos contacto. También es una época de conexión con nuestros propios deseos, nuestros anhelos y nuestros propósitos, aunque luego queden en agua de borrajas . Hace unos 15 años, en uno de estos momentos de preparación de la Felicitación Navideña, se me ocurrió coger trocitos de lienzo, pintarlos y escribir una frase para enviárselos a mis clientes y amistades. Lo pasé bien, jugando con colores y brillos. Me costó encontrar la frase... Finalmente la ...
Me gusta tu reflexión.
ResponderEliminarSin explorar nuevas posibilidades, todo es más de lo mismo y eso hoy en la empresa sirve para muy poco.
No invertir tiempo y recursos en explorar nuevas posibilidades, es constatar de modo evidente nuestra carencias para evolucionar.
Bien está lo conseguido, pero mejor es, estar abierto a todo lo que falta por conseguir.
Un poco de aíre fresco no vendría nada mal en las empresas, porque habitualmente el que hay esta algo "viciado".
Salu2:
Bienvenido Seriecito como militante de la POSIBILITANCIA, ¿qué se te ocurre de nuevo para hoy? Yo creo que voy a practicar la "nocompra" y el "siintercambio".
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